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CRIF participa en SUGAR Expo Cloud junto con la Universidad de Bolonia y la Universidad TU Dortmund

SUGAR Expo Cloud es uno de los eventos de innovación global más importantes del mundo, promovido por SUGAR, la red internacional más grande que reúne a universidades, empresas y organizaciones globales con el objetivo de trabajar juntos en el futuro de la innovación y crear nuevas soluciones con un impacto real en la sociedad y las personas.

Entre los participantes del evento, normalmente celebrado en California pero este año realizado íntegramente en línea el 1 de junio, se encontraba un equipo de estudiantes de la Universidad de Bolonia, en colaboración con Almacube y la Universidad de Módena y Reggio Emilia.

CRIF junto con su centro de innovación global InnovEcoS, se asoció con la Universidad de Bolonia y la Universidad TU Dortmund, desafiando al equipo de estudiantes sobre cómo repensar la relación con la Generación Z para acercarlos al mundo de las finanzas, la sostenibilidad y los datos.

“En un contexto de mercado en rápida evolución, la aceleración dramática provocada por las nuevas demandas que surgen de la pandemia por un lado y por la innovación tecnológica por el otro, representa un punto sin retorno”, comentó Natalia Shchelovanova, Líder de Ecosistemas e Innovación Global en CRIF.

“La innovación continua, siempre ha estado en el ADN de CRIF, pero en los últimos años hemos acelerado aún más en este camino, desarrollando una serie de módulos y componentes de servicio capaces de entregar verdaderos modelos abiertos de negocios y transformación digital que nos permitan aprovechar todas las oportunidades, gracias a un enfoque ecosistémico. Participar en iniciativas como SUGAR es una oportunidad extraordinaria para iniciar y mantener un círculo virtuoso, que nos lleva a trabajar junto a jóvenes talentos y nuevos emprendimientos”, agregó Beatrice Rubini, Directora Ejecutiva de CRIF.

Antes de participar en este evento global, el trabajo comenzó hace nueve meses, involucrando a 17 equipos de estudiantes provenientes de alrededor de 25 universidades internacionales. Los equipos trabajaron en una serie de desafíos de innovación propuestos por un panel de empresas y organismos internacionales. Para ello, se adoptó un enfoque de Design Thinking: un enfoque de investigación donde los usuarios para los que diseñamos, estén siempre en el centro del proceso, con transformaciones continuas entre los diversos desarrollos de las soluciones ideadas, que se aplican en campo y revisado con prototipos y pruebas.